El Cardenal Paul Josef Cordes escribió su libro: “El eclipse del padre”, inspirado en una cita del filósofo francés Charles Péguy que afirmó: “Solo hay una aventura en el mundo, la del padre de familia”. Desde la fe en Cristo estamos convencidos de que además de ser hijos de un padre y una madre, somos hijos amados del Padre Eterno desde el bautismo. Jesucristo llama 170 veces Padre a Dios, lo que indica la intimidad e importancia que para el Divino Maestro tiene esta palabra. Aquí podemos encontrar inspiración para acercarnos a la paternidad humana como vocación y responsabilidad, abriendo nuevos horizontes para lograr superar la crisis de la figura del padre que el mundo está experimentando. El regalo de un hijo es una oportunidad maravillosa para vencer el propio egoísmo que en el varón suele ser más fuerte que en la mujer.
“La sabiduría clásica enseña que los padres de familia (mamá y papá) han sido llamados a participar en la construcción del mundo de las personas de una manera única, exclusiva y fundamental: trayendo otras personas a la existencia y educándolas a partir de su amor”. La familia y el hogar siempre serán lugares a donde regresemos, porque ahí encontramos nuestras raíces, maduramos como personas y experimentamos el sentido filial que nos hace inmensamente felices.
Autor: Padre Ángel Acuña Montenegro
Bibliografía:
Cordes, Paul Josef (20004), El eclipse del padre, Palabra, Madrid.
Wojtyla, Karol (2008), Amor y responsabilidad, Palabra, Madrid.